hombre con pelo blanco canas aburrido en cita con una sugar baby
hombre con pelo blanco canas aburrido en cita con una sugar baby

La primera cita en el mundo del sugar dating puede definir el rumbo completo de una conexión. Después de semanas intercambiando mensajes por WhatsApp, construyendo expectativas y ajustando agendas, ese encuentro inicial representa el momento donde las palabras se convierten en presencia real. En Latinoamérica, donde las apariencias sociales importan tanto como el contenido de una conversación, ese primer cara a cara adquiere un peso especial.

Lo cierto es que muchas sugar babies nuevas cometen errores evitables que terminan cerrando puertas antes de tiempo. No se trata de ser perfecta ni de actuar como alguien que no eres—todo lo contrario. Se trata de entender las dinámicas particulares de este tipo de relación y adaptarte sin perder autenticidad. Porque seamos honestos: en países donde la familia opina, donde “el qué dirán” sigue presente, y donde cada ciudad tiene sus propios códigos no escritos, navegar una primera cita requiere algo más que buenas intenciones.

Este artículo te guiará a través de los errores más comunes que pueden arruinar esa oportunidad de oro. Desde cuestiones de puntualidad hasta temas de conversación delicados, pasando por señales culturales que varían drásticamente entre México y Argentina, entre Bogotá y Santiago. Si estás a punto de tener tu primera cita como sugar baby, o si las anteriores no salieron como esperabas, lo que viene a continuación puede cambiar completamente tus resultados.

La puntualidad habla de respeto antes que las palabras

elegant young latin woman checking her watch anxiously in upscale cafe, warm afternoon lighting, sop

En ciudades como Ciudad de México, donde el tráfico transforma un trayecto de 20 minutos en una odisea de hora y media, la puntualidad adquiere un significado particular. No se trata solo de llegar a tiempo—se trata de demostrar que valoras el tiempo del otro tanto como el tuyo. Un sugar daddy que ajustó su agenda de reuniones, que salió temprano de la oficina en Polanco o que reorganizó compromisos para ese encuentro, espera reciprocidad en ese gesto.

Ahora bien, llegar tarde sin avisar es el primer error cardinal. Pero aparecer 30 minutos antes tampoco proyecta la imagen correcta. Transmite ansiedad, inseguridad o falta de experiencia. El equilibrio está en llegar puntual o con un margen de 5 a 10 minutos, y si surge un imprevisto real—porque el metro de Buenos Aires decidió detenerse o porque las lluvias en Medellín complicaron todo—comunicarlo inmediatamente por WhatsApp con transparencia.

Fíjate que en culturas latinoamericanas más relajadas, como en algunas zonas de Colombia o en la costa caribeña, existe cierta flexibilidad horaria en contextos sociales casuales. Pero el sugar dating no entra en esa categoría. Funciona con códigos más cercanos a los del mundo profesional, donde la puntualidad es sinónimo de seriedad. Una sugar baby que llega tarde sin justificación está comunicando, aunque no lo diga, que esa cita no es prioridad para ella.

Además, considera el lugar. Si acordaron verse en un restaurante elegante de Miraflores en Lima o en un hotel boutique de Cartagena, llegar tarde no solo te afecta a ti—afecta la experiencia completa. El lugar estaba reservado para cierta hora, la mesa preparada, la logística pensada. Romper ese flujo desde el inicio genera tensión innecesaria que podría haberse evitado con mejor planificación.

El dinero existe en la conversación, pero no como protagonista inicial

refined latin american woman having animated conversation with sophisticated older gentleman at eleg

Este es probablemente el tema más delicado de todos. Porque sí, el sugar dating involucra un acuerdo donde el apoyo económico forma parte central, pero abordarlo de manera directa y cruda en la primera cita puede destruir cualquier química naciente. La diferencia entre una sugar baby experimentada y una principiante se nota justamente en cómo maneja esta conversación.

En Latinoamérica, donde las transacciones explícitas de dinero por compañía todavía cargan estigma social fuerte (especialmente en países con mayor influencia católica como Perú, Ecuador o partes de Centroamérica), ir directo al grano con cantidades y expectativas financieras puede resultar chocante. No es que el tema no deba tocarse—debe hacerlo eventualmente—pero el timing y la forma son cruciales.

Lo que funciona mejor es construir primero una conexión genuina. Pregunta sobre sus intereses, sus viajes favoritos, qué lo trajo a esa ciudad si es de otro lugar. Deja que la conversación fluya hacia temas de estilo de vida de manera natural. Cuando él mencione su trabajo, sus proyectos o sus pasatiempos, ahí se abren espacios orgánicos para entender su situación sin preguntar directamente por cifras. Una sugar baby inteligente lee entre líneas: el tipo de restaurante que eligió, cómo habla sobre sus vacaciones, los detalles que menciona sobre su día a día.

Dicho esto, tampoco caigas en el extremo opuesto de evitar totalmente el tema. Si después de dos horas de conversación amena ninguno ha mencionado siquiera indirectamente las expectativas del acuerdo, entonces estás en una cita regular, no en sugar dating. El arte está en el equilibrio. Cuando el momento llegue—y lo sentirás—puedes abordar el tema con naturalidad: “Me encantaría saber qué tipo de dinámica estás buscando” o “¿Cómo imaginas que funcionaría nuestro acuerdo?” son formas mucho más elegantes que “¿Cuánto me darías mensualmente?”

Además, recuerda que en plataformas como Sugar Daddy Planet, muchas de estas expectativas se clarifican antes del encuentro físico, lo que facilita que la primera cita se centre más en la compatibilidad personal que en negociaciones frías.

Construye conexión primero

Antes de hablar de expectativas concretas, dedica tiempo a conocerse genuinamente. Pregunta sobre sus intereses, sus proyectos actuales, qué lo apasiona fuera del trabajo. Esta base de conexión humana facilita que las conversaciones posteriores sobre el acuerdo fluyan con naturalidad y sin incomodidad. La química personal es el fundamento sobre el cual se construye todo lo demás.

Lee entre líneas

Observa los detalles que revelan su estilo de vida sin preguntar directamente. El tipo de lugar que eligió para la cita, cómo habla sobre sus viajes, los restaurantes que menciona casualmente, su forma de vestir, incluso el modelo de reloj que usa. Todos estos elementos te dan información valiosa sobre su situación y sus posibilidades, permitiéndote calibrar tus expectativas de manera realista.

Usa preguntas indirectas

Cuando llegue el momento de abordar expectativas, hazlo con elegancia. En lugar de preguntar cantidades específicas, plantea cuestiones como “¿Qué tipo de dinámica buscas en este acuerdo?” o “¿Cómo te imaginas que funcionaría nuestra conexión?”. Estas preguntas abiertas permiten que él exprese sus intenciones sin sentirse presionado, y te dan espacio para evaluar si sus expectativas se alinean con las tuyas antes de entrar en detalles específicos.

Tu imagen personal comunica más que mil palabras

La forma en que te presentas físicamente en esa primera cita transmite mensajes poderosos antes de que digas una sola palabra. No se trata de transformarte en alguien que no eres ni de vestirte según estándares ajenos—se trata de mostrar la mejor versión de ti misma adaptada al contexto específico. Y ese contexto, en el sugar dating latinoamericano, tiene matices particulares.

En una región donde las diferencias entre ciudades cosmopolitas como Buenos Aires o Ciudad de México y lugares más tradicionales como partes de Guatemala o Paraguay son enormes, tu outfit debe demostrar que investigaste, que pensaste en la ocasión. Si la cita es en un restaurante elegante de San Isidro en Lima, aparecer en jeans rotos y zapatillas deportivas comunica desinterés. Si es en un beach club exclusivo de Cancún, llegar con vestido de cóctel formal muestra desconexión con el ambiente.

stylish latin woman in elegant casual outfit looking confident, upscale urban background, soft natur

La clave está en elegancia relajada. Un vestido simple pero bien cortado, accesorios que complementen sin abrumar, maquillaje que realce sin exagerar. Piensa en las influencers latinoamericanas exitosas—no las que buscan atención desesperada con outfits extravagantes, sino aquellas que proyectan sofisticación natural. Ese es el estándar al que apuntar.

Además, considera las particularidades culturales. En países donde el catolicismo y las tradiciones pesan más, como en ciertas zonas de Colombia o en Ecuador, mostrar demasiada piel puede interpretarse negativamente. No es que debas cubrirte por completo, pero sí ser consciente de que lo que en Miami o São Paulo es perfectamente normal, en Quito o en zonas más conservadoras de Centroamérica puede resultar chocante. Adaptar tu presentación al contexto cultural demuestra inteligencia social y madurez.

Por otro lado, el cuidado personal básico no es negociable. Cabello limpio y arreglado, uñas cuidadas, fragancia sutil pero presente, piel que luzca saludable. Estos detalles hablan de amor propio y de respeto hacia la otra persona. En culturas latinoamericanas donde las apariencias importan tanto, descuidar estos aspectos básicos puede interpretarse como falta de interés real en la conexión.

El lenguaje corporal revela lo que las palabras callan

Ahora bien, más allá de la ropa y el maquillaje, tu lenguaje corporal puede construir puentes o levantar muros. En Latinoamérica, donde los encuentros sociales tienden a ser cálidos y las distancias personales más cortas que en otras culturas, una sugar baby que se mantiene físicamente distante todo el tiempo envía señales confusas.

Ojo, no estoy sugiriendo contacto físico inapropiado—estoy hablando de apertura básica. Mantener los brazos cruzados durante toda la cita crea una barrera visual que dice “no estoy cómoda” o “no confío en ti”. Evitar el contacto visual puede interpretarse como desinterés, inseguridad o incluso deshonestidad. En países donde la calidez y la expresividad son norma, como en Colombia, Argentina o República Dominicana, una postura corporal cerrada contrasta fuertemente con las expectativas culturales.

Por el contrario, inclinarte ligeramente hacia adelante cuando él habla demuestra interés genuino. Sonreír de manera natural (no forzada) crea un ambiente relajado. Permitir contacto casual apropiado—como no apartarte si él toca tu brazo brevemente al hacer un punto en la conversación—muestra comodidad con la cercanía. Estos pequeños gestos suman para crear una atmósfera de conexión real.

Además, según expertos en psicología social, más del 55% de la comunicación humana es no verbal. Tus gestos, tu postura, tus microexpresiones faciales están comunicando constantemente. Una sugar baby consciente de esto tiene una ventaja enorme sobre aquellas que solo prestan atención a las palabras.

Escuchar activamente vale más que hablar constantemente

Este es un error sorprendentemente común: sugar babies nuevas que, por nerviosismo o por intentar impresionar, hablan sin parar durante toda la cita. Hablan de sus planes, sus sueños, sus experiencias pasadas, sus opiniones sobre todo. Y en el proceso, olvidan lo más importante: conocer realmente a la persona frente a ellas.

Un sugar daddy exitoso—el tipo de hombre que generalmente participa en sugar dating—está acostumbrado a que lo escuchen. En su vida profesional, probablemente lidera reuniones, toma decisiones importantes, y mucha gente busca su aprobación. En ese contexto, una mujer que realmente lo escucha, que hace preguntas inteligentes, que muestra interés genuino en su perspectiva, se destaca inmediatamente.

professional latin woman listening attentively during conversation at upscale venue, engaged facial

La escucha activa no significa solo quedarte callada mientras él habla. Significa procesar lo que dice, hacer preguntas de seguimiento relevantes, conectar ideas que mencionó antes con nuevos temas. Por ejemplo, si al inicio de la cita mencionó que acaba de regresar de un viaje de negocios a Panamá, y más tarde surge el tema de gastronomía, podrías preguntar qué restaurantes visitó allá o cómo compara la escena culinaria panameña con la de tu ciudad. Esos detalles demuestran que realmente estabas prestando atención.

Además, en culturas latinoamericanas donde la sobremesa puede extenderse por horas—piensa en esas comidas familiares interminables donde la conversación fluye sin prisa—saber mantener un diálogo equilibrado es una habilidad valorada. No se trata de un monólogo ni de un interrogatorio. Se trata de un intercambio genuino donde ambos comparten, ambos preguntan, ambos escuchan.

Te confieso algo: en mis años cubriendo temas de relaciones y estilo de vida, he entrevistado a docenas de hombres exitosos, y prácticamente todos mencionan lo mismo. La capacidad de una mujer para mantener una conversación interesante sin dominan completamente el espacio sonoro es increíblemente atractiva. No se trata de sumisión—se trata de equilibrio e inteligencia social.

Las señales culturales importan más de lo que imaginas

Latinoamérica no es un bloque monolítico. Las diferencias entre países, e incluso entre ciudades dentro del mismo país, pueden ser enormes. Lo que funciona perfectamente en una cita en Palermo, Buenos Aires, podría resultar inadecuado en una zona más tradicional de Guadalajara. Entender estas diferencias culturales te ayuda a navegar distintos contextos con mayor éxito.

Por ejemplo, en Argentina, especialmente en Buenos Aires, la gente tiende a ser más directa en sus comunicaciones y más abierta sobre temas que en otros países podrían considerarse demasiado personales para una primera cita. El humor es más ácido, las conversaciones pueden volverse profundas rápidamente, y existe cierta expectativa de que puedas debatir temas diversos con cierta sofisticación. Una sugar baby que llega a una cita en Buenos Aires esperando conversación superficial y temas seguros podría encontrarse desubicada.

En contraste, en ciudades como Monterrey o en partes más conservadoras de Colombia, las primeras citas tienden a ser más formales. Los temas de conversación se mantienen en zonas seguras por más tiempo. Las referencias religiosas o familiares aparecen naturalmente sin que resulte extraño. Una sugar baby que en ese contexto empieza a hablar abiertamente sobre temas controversiales o que muestra poco respeto por valores tradicionales puede crear fricción innecesaria.

Fíjate también en las dinámicas de pago. En la mayoría de Latinoamérica, se espera que el hombre pague la cuenta en una primera cita, especialmente en el contexto del sugar dating. Pero la forma en que manejas ese momento importa. Hacer el gesto de ofrecer contribuir (incluso sabiendo que probablemente lo rechazará) demuestra educación. Pero insistir demasiado o parecer incómoda con que él pague puede generar confusión sobre tus expectativas y comprensión del tipo de relación que están explorando.

Además, considera las festividades y eventos culturales. Si tu cita cae cerca del Día de Muertos en México, o durante Carnaval en Brasil, o en época de festivales importantes como Lollapalooza o Rock in Rio, mencionar estos eventos demuestra que estás conectada con la cultura local. Eso genera puntos de conversación naturales y muestra que no vives en una burbuja desconectada de tu entorno.

Tus redes sociales hablan por ti antes de la cita

En la era digital latinoamericana, donde WhatsApp es prácticamente una extensión de nuestra identidad y donde Instagram funciona como un portafolio visual de nuestras vidas, tus redes sociales son parte integral de tu primera impresión. Muchas sugar babies cometen el error de no revisar lo que sus perfiles públicos comunican antes de esa primera cita importante.

latin woman reviewing her social media profile on smartphone in modern setting, thoughtful expressio

Si tu Instagram está lleno de fotos de fiestas descontroladas, contenido excesivamente provocativo, o posts que revelan drama constante y relaciones conflictivas, estás comunicando cosas sobre tu estilo de vida y madurez que pueden no alinearse con lo que un sugar daddy busca. No se trata de crear un perfil falso o de eliminar toda tu personalidad—se trata de ser consciente de la imagen que proyectas.

Por otro lado, un perfil completamente vacío o con solo dos fotos antiguas también genera dudas. Puede interpretarse como que estás escondiendo algo o que no tienes una vida social real. El equilibrio está en mantener perfiles que reflejen una vida interesante pero equilibrada: viajes, hobbies, momentos con amigos (sin excesos), intereses culturales, quizás algún logro profesional o académico.

Además, revisa tus configuraciones de privacidad. Si bien no necesitas hacer todo privado, considera qué información es visible públicamente. Fotos de tu familia, tu dirección exacta geolocalizada en cada post, contenido que revele detalles muy personales o comprometedores—todo esto debería estar protegido, especialmente cuando empiezas a explorar el mundo del sugar dating donde la discreción es un valor fundamental.

Y hablando de WhatsApp, presta atención a cómo te comunicas por escrito antes de la cita. Mensajes llenos de errores ortográficos, respuestas monosilábicas que no aportan nada a la conversación, o por el contrario, mensajes excesivamente largos que parecen novelas, todos comunican cosas sobre ti. Tu forma de escribir revela tu nivel educativo, tu capacidad de comunicación, tu interés real en la conexión. En Latinoamérica, donde WhatsApp es el canal principal para mantener contacto, dominar esa comunicación escrita es tan importante como la presencial.

La indiscreción puede arruinarlo todo antes de que empiece

Este es un error que puede tener consecuencias más allá de simplemente no conseguir una segunda cita—puede afectar tu reputación en la comunidad del sugar dating y cerrar puertas futuras. En Latinoamérica, donde “el qué dirán” sigue siendo poderoso y donde las comunidades están más interconectadas de lo que parece, la indiscreción puede ser devastadora.

Algunas sugar babies nuevas cometen el error de compartir detalles de sus citas con amigas, de postear indirectas en redes sociales, o incluso de mencionar nombres o información identificable sobre sus sugar daddies. Esto es inaceptable en este mundo. La discreción no es solo una preferencia—es un requisito fundamental. Los hombres que participan en sugar dating valoran profundamente su privacidad, especialmente si tienen familias, posiciones públicas o negocios que proteger.

Durante la primera cita, demostrar que entiendes y respetas la importancia de la discreción es crucial. Esto significa no tomar fotos sin permiso, no hacer check-in en redes sociales del lugar donde están, no preguntar detalles excesivamente personales que él claramente no quiere compartir, y definitivamente no mencionar que tienes otros acuerdos o que estás activa en plataformas de sugar dating.

Además, en ciudades más pequeñas o en círculos sociales más cerrados—piensa en lugares como San Pedro Sula, o zonas exclusivas de ciudades como el Country Club en Guadalajara o Vitacura en Santiago—la gente se conoce. Un comentario fuera de lugar, una historia compartida con la persona equivocada, puede llegar a oídos no deseados. La capacidad de mantener la boca cerrada sobre detalles privados es, irónicamente, una de las cualidades más atractivas que puedes demostrar.

Protege su privacidad siempre

Nunca compartas detalles identificables sobre tu sugar daddy con nadie. Esto incluye su nombre completo, su profesión específica, lugares que frecuenta o cualquier información que pudiera llevar a identificarlo. La discreción absoluta es la base sobre la cual se construye la confianza en estas relaciones. Demuestra desde la primera cita que entiendes y respetas profundamente este principio fundamental del sugar dating.

Cuidado con tus publicaciones

Evita hacer check-ins en redes sociales del lugar donde están, no postees fotos de la cita (ni siquiera del lugar sin mostrar a la persona), y no hagas indirectas que puedan conectarse con esa salida. Incluso emojis o comentarios vagos pueden ser identificados por personas cercanas. Tu presencia digital debe permanecer completamente separada de tus actividades de sugar dating. La tentación de presumir puede arruinar todo.

No compartas con amigas detalles

Aunque sea tentador contar detalles emocionantes a tus amigas cercanas, resiste esa tentación. Las conversaciones se filtran, las personas hablan más de lo que deberían, y en comunidades latinoamericanas donde todos parecen conocer a alguien que conoce a alguien, la información viaja. Mantén tus experiencias de sugar dating completamente separadas de tu círculo social regular. Es la única manera de garantizar verdadera discreción.

Preguntas frecuentes sobre la primera cita como sugar baby

¿Cuánto debería durar la primera cita con un sugar daddy?

La duración ideal de una primera cita en sugar dating suele estar entre 1.5 y 3 horas. Este tiempo permite conocerse lo suficiente sin generar agotamiento o presión. En culturas latinoamericanas donde las sobremesas pueden extenderse naturalmente, está bien dejar que la conversación fluya, pero también es importante leer las señales. Si él empieza a mirar el reloj o menciona compromisos, respeta su tiempo. Por otro lado, si la química es buena y ambos están disfrutando, no hay problema en extender el encuentro. La clave es mantener flexibilidad mientras demuestras que valoras su agenda.

¿Está bien hablar de otros sugar daddies en la primera cita?

Definitivamente no. Mencionar otros acuerdos actuales o pasados en una primera cita es uno de los errores más comunes y perjudiciales. Hace que él se sienta como una opción más en una lista, no como alguien especial. Además, genera dudas sobre tu discreción: si hablas libremente de otros, ¿qué te impedirá hablar de él con la siguiente persona? Enfócate completamente en conocerlo a él, en esa conexión específica. Si surge el tema de experiencia previa en sugar dating, puedes mencionarlo de manera general y breve, pero nunca con detalles específicos sobre otras personas.

¿Qué hago si la conversación se vuelve incómoda o inapropiada?

Si la conversación toma un giro que te hace sentir incómoda, tienes todo el derecho de redirigirla con elegancia. Puedes decir algo como “Prefiero conocernos un poco más antes de entrar en ese tema” o simplemente cambiar de tema haciendo una pregunta sobre algo que mencionó antes. Si la incomodidad persiste o si cruza límites claros (comentarios demasiado sexuales, solicitudes inapropiadas, falta de respeto), tienes derecho a terminar la cita. Tu seguridad y comodidad son prioritarias. Un verdadero caballero respetará tus límites desde el primer momento.

¿Debo aceptar ir a su casa u hotel en la primera cita?

Esta decisión depende completamente de tu nivel de comodidad y las señales que hayas recibido durante la cita. Como regla general, las primeras citas en sugar dating deberían ocurrir en espacios públicos—restaurantes, cafés, bares elegantes. Esto protege tu seguridad y permite conocerse sin presión. Si después de varias horas de conversación excelente él sugiere continuar en un lugar más privado y tú te sientes completamente cómoda y segura, es tu decisión. Pero nunca te sientas presionada. Un sugar daddy genuino y respetuoso entenderá si prefieres esperar a conocerlo mejor. Tu instinto es tu mejor guía en estas situaciones.

¿Cómo manejar el tema de exclusividad en la primera cita?

El tema de exclusividad generalmente no debería abordarse en la primera cita, a menos que él lo mencione directamente. Ese tipo de conversaciones pertenecen a etapas más avanzadas cuando ya existe confianza y conexión establecida. Si él pregunta sobre tu disponibilidad o situación actual, puedes ser honesta pero sin entrar en detalles específicos: “Estoy conociendo personas pero busco algo especial con la persona correcta” es una respuesta apropiada. Lo importante es no mentir, pero tampoco revelar información que no sea necesaria en ese momento. Construir exclusividad toma tiempo y requiere que ambos sientan que vale la pena comprometerse mutuamente.

La primera impresión puede abrir todas las puertas

Después de revisar todos estos errores comunes, el mensaje central es claro: la primera cita en el mundo del sugar dating latinoamericano requiere preparación consciente, pero sin perder autenticidad. Se trata de mostrar la mejor versión de ti misma sin construir una fachada falsa que no podrás sostener.

confident latin woman walking into upscale restaurant entrance at sunset, elegant attire, warm golde

Cada uno de estos errores—desde la impuntualidad hasta la indiscreción, desde hablar demasiado de dinero hasta ignorar señales culturales—tiene el potencial de cerrar una puerta que quizás no vuelva a abrirse. Pero la buena noticia es que todos son completamente evitables con conciencia y práctica. No necesitas ser perfecta. Necesitas ser genuina, respetuosa, consciente de tu entorno cultural y capaz de conectar genuinamente con la persona frente a ti.

Recuerda que el sugar dating, especialmente en Latinoamérica donde las dinámicas sociales son únicas, es tanto sobre compatibilidad personal como sobre acuerdos prácticos. Un sugar daddy exitoso puede tener múltiples opciones, pero lo que realmente buscará es alguien con quien disfrute pasar tiempo, alguien que agregue valor positivo a su vida más allá de lo superficial. Evitar estos errores comunes te coloca en una posición ventajosa para demostrar exactamente eso.

Entonces, antes de tu próxima primera cita, revisa esta lista. Pregúntate honestamente si estás cometiendo alguno de estos errores. Ajusta lo necesario, confía en ti misma, y acércate a ese encuentro con la combinación perfecta de confianza y humildad. El resto fluirá naturalmente cuando los fundamentos están bien establecidos.

Summary
sugar baby: evita estos errores en tu primera cita
Article Name
sugar baby: evita estos errores en tu primera cita
Description
Sugar DaddyLatam® - Red social latinoaméricana de contactos entre sugar daddys y sugar babys.
Author
Publisher Name
Sugar DaddyLatam® - Red social latinoaméricana de contactos entre sugar daddys y sugar babys.
Publisher Logo

4 comentarios:

  1. ana

    12 septiembre, 2025 a 12:52 am

    estoy muy de acuerdo en todo

    Responder
  2. Irene

    29 septiembre, 2025 a 12:48 pm

    Me ayudan soy nueva

    Responder
  3. Valeria

    5 octubre, 2025 a 1:26 am

    Recién empezando, tomo nota de todos los consejos que me dan, gracias! Fue de mucha ayuda

    Responder
  4. Alejandra

    23 octubre, 2025 a 11:32 pm

    Soy nueva en el sitio y lo que me deja para aprender este blog es que tenemos que ser más astutas que el hombre, hacernos desear por el mismo y ponernos el valor que merecemos

    Responder

Dejar una Respuesta


INGRESA EN TU CUENTA CREAR UNA CUENTA NUEVA

Su privacidad es importante para nosotros y nunca alquilaremos ni venderemos su información.

 
×

 
×
¿HAS OLVIDADO TUS DATOS?
×

Subir